martes, 19 de febrero de 2013

Los "no límites" del arte

El mayor y más famoso de los falsificadores de arte de la historia Elmyr de Hory, expone "su obra" en el círculo de Bellas artes de Madrid hasta el 12 de Mayo de 2013. Esta exposición, como dicen en el círculo de Bellas artes, cito textualmente: "nos plantea una reflexión sobre el concepto de autoría en la creación artística, el carácter de lo verdadero y lo falso en el arte, su magia, sus contradicciones, sus miserias y grandeza" Este personaje que firmaba con los nombres de Picasso y Modigliani, llevó su fraude a las mejores salas de exposiciones cobrando millones por sus falsificaciones. Hoy en día seguimos imitando los clásicos y hay artistas que utilizan una obra de otro artista para su proyecto artístico, ya sea para reinterpretarlo, para usar su reproducción total o parcial en su obra etc... Todos los artistas tenemos algo de "falsificadores" ya que en nuestro empeño de mejorar, nos obsesionamos con plasmar la pincelada de tal autor, el color de tal obra o "falsificamos" la realidad la intentar copiar una fotografía.Incluso Miguel Ángel falsificó algun cuadro en su primera etapa, convirtiéndose en uno de los primeros falsificadores de la historia. ¿Donde está el limite? Es una de las preguntas que me hago y que incluso muchos alumnos me hacen cuando copiamos láminas de artistas.El límite, creo yo, que debe estar en uno mismo, en lo que valoras y en lo que crees. Para el aprendizaje está claro que conviene copiar de vez en cuando a los clásicos.Copiar, versionar, interpretar, mejorar...Y muchos más verbos... El debate surge realmente cuando en una sala ves a la venta una copia de un cuadro conocido y en el que ni siquiera se menciona al artista del que se partió.Hasta aquí puedo escribir... Por otra parte el arte siempre fue una forma de vida y hoy en día además se ha convertido en un negocio.Actualmente la mayoría de los artistas tienen que meterse en ese mercado del arte para sobrevivir... El precio del arte está controlado por un circuito muy complejo formado por marchantes, galerías, comisarios, críticos, instituciones, políticos, artistas, etc...Y por eso, como en todo negocio, hay empresas buenas y empresas malas.Hay arte para todos los gustos y colectivos sociales. El hecho de que una obra tenga más valor por quien la hizo y no por ella misma, o ni siquiera por su valor estético o histórico, es otro punto de debate que se plantea con esta exposición. Ahora debemos pensar acerca de cómo nos comportamos en el presente, día a día.En las infinitas contradicciones que hay en nuestra forma de vivir y de valorar nuestro entorno.Lo que vestimos, comemos, leemos, escuchamos, visitamos...Todos los medios de comunicación que nos generan "necesidades" de marcas, firmas de ropa, coches, novelistas, artistas...Todos ellos de moda o más valorados por su historia. Todo esto nos deberá servir para que poco a poco el precio de una obra de un artista reconocido no nos escandalice tanto y sobre todo para valorar una obra, no por ser la más conocida o la del artista famoso, sino por lo que nos llega al admirarla. Hay mucho que pensar!!! Un saludo a todos!

2 comentarios:

ANA dijo...

Pues si me hace reflexionar....yo no iria a ver esa exposición...de acuerdo en que el arte siempre fue una forma de vida y que hoy en día además se ha convertido en un negocio...pero el verdadero artista crea una obra siempre como una necesidad de expresión y le cuesta desprenderse de ella porque de algún modo es parte de él...el falsificador de cuadros no crea,copia y lo hace sólo para lucrarse por lo que para mi no es un artista...repito: no iria a ver esa exposición....

canarios dijo...

Ser un artista no es copiar. Un verdadero artista crea, plasma lo que en un determinado momento se imagina piensa y ve en su mente, éso si que hay que valorarlo, es algo de uno mismo y no copias de otros.